EVITA EL SÍNDROME POST-VACACIONAL

¿Estrés postvacacional? NO!

Siempre ocurre. Y ya sabemos que va a ocurrir. Se acerca el fin de las vacaciones y ya comienzas a sentir esos nervios en el cuerpo, empiezas a hablar con tu mente «todavía quedan días, desconecta», «no te preocupes, no pienses en ello»… como si nos quedaran pocos días para llegar al infierno. Creo que exageramos bastante, pero a pesar de ello, es normal sentirse así.

Según dicen los expertos, se necesitan al menos 3 días para que el cuerpo y la mente logren adaptarse a las rutinas. Y entre los síntomas más comunes se encuentran la apatía, nerviosísimo, fatiga y alteraciones de sueño.

estres postvacacional
Yo he encontrado varias formas de evitar sentirme nerviosa por comenzar de nuevo, porque sí, mi trabajo me encanta, pero eso no quiere decir que no exista un mínimo de estrés y tensión. ¿Queréis saber como lo he conseguido? Continúa leyendo.

 

«La mayoría de las cosas que hacemos en nuestra vida, hasta un 40%, está basada en hábitos»

A lo largo del año, todos y todas terminamos yendo en piloto automático porque nos hemos acostumbrado a la rutina, y en vacaciones nos ocurre lo mismo; nos acostumbramos a ese estilo de vida y cuando tenemos que recuperar la rutina anterior nos suele costar mucho. Si no lo hacemos correctamente…

Estos son mis consejos, los cuales suelo aplicar y te puedo asegurar de que vuelvo a trabajar con ganas:

  1. Conéctate unos días antes.  No lo hagas justo el día previo, que puedes generar hasta el efecto contrario y estresarte aún más. Yo recomiendo abrir el correo (por ejemplo) unos cuantos días antes, o ir planificando la agenda. Este método servirá para que tu mente se vaya poniendo en situación, te sentirás más organizad@ y eso te tranquilizará.
  2. Retoma poco a poco tu horario. No te vayas a dormir tarde los últimos días, o aunque sea ve alternando. Es esencial ir acostumbrando a tu mente y a tu cuerpo al descanso, trata de dormir 7-9 horas en la horas que sueles dormir cuanto no estás de vacaciones. Lo agradecerás.
  3. No pases de 0 a 100 los primeros días de trabajo. No es buena idea. Trata de no ponerte grandes y demasiados objetivos los primeros tres días, ya que estos días no suelen ser muy productivos. Date tiempo para aterrizar y comunicarte con los compañeros. Empieza por ejemplo por hacer una reunión el lunes con tu equipo y llamar a x empresa, el martes sal a hacer una visita y revisa tus correos, y así sucesivamente.
  4. Valora la parte positiva de la vuelta. ¡Si! ¡volver a trabajar tiene su parte positiva! Nuevos proyectos, reencuentros con compañeros, ideas frescas… si tratas de mantener tu mente positiva, todo será mucho más fácil.
  5. Hábitos saludables. ¿Eres de los que cada año nuevo se fija un objetivo? Bien, pues como cada año nuevo, ahora también es el momento de planificar y crear nuevos hábitos saludables. Apúntate a una nueva actividad física, ve caminando al trabajo, haz ejercicio en ayunas… ¡lo que sea! Esto te dará una mayor motivación y a largo plazo verás grandes resultados.
  6. El primer fin de semana de la vuelta aprovecha y haz algo diferente, no te quedes en casa. Planifica algo que te guste y que te haga desconectar.
  7. Por último, y quizá el más importante (al menos para mi) es no volver de vacaciones justo el día anterior a la incorporación laboral. Estar unos días en casa te vendrá mejor que bien para poner todo esto en práctica e ir aterrizando.

Si necesitas que te ayude con la planificación de la vuelta o simplemente te sientes perdi@, ¡escríbeme sin compromiso!

¿Y a ti, qué te funciona mejor?

 

Te invito a que me sigas también a través de Instagram (@izas.ortiz) donde subo un montón de contenido interesante sobre desarrollo personal, hábitos y tips. ¡Únete a la comunidad!